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jueves, 20 de septiembre de 2007
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Los Torneos Nacionales de Primera son sumamente importantes para el desarrollo y el crecimiento del tenis. Permiten a los jugadores mantener una competencia importante y sumar experiencia adentrándose en un nivel que les abre las puertas para estar a un paso de poder medirse para muchos en la elite del tenis profesional, con el único objetivo de poder sumar puntos ATP.
Todo el tenis cordobés
El día domingo tenía que ser fiesta y así fue. Los motivos eran muchos y muy distintos por cierto. En primer lugar, la buena cantidad de público que se dio cita en la cancha 2 de la U. En segundo lugar, porque la organización estaba cerca de cumplir su objetivo (en ese día tuvo otro acierto que fue el cambio de horario). Y en tercer lugar porque los protagonistas del último partido tenían muy bien merecido su condición de finalistas. Ellos eran el cordobés Agustín Tarantino y el santafesino Ignacio Mártire.
Allí estaban frente a frente; y ya en el peloteo previo se podía apreciar la solidez de Tarantino y la mezcla de ansiedad y nervios que tenía el juvenil Mártire.
Comenzó el primer set con un Mártire jugando de la misma forma que lo había hecho en la semi ante Monteferrario. Metiendo todo y buscando el desgaste de su rival. A quién por momentos de esa primera manga lo hizo correr por todo el fondo.
El visitante lo llegó a tener 5/2. Generando de esta forma murmullos con una mezcla de asombro y sorpresa. Pero no lo supo aguantar psicológicamente. Esto le permitió a Tarantino recuperarse anímicamente y hacer gala de su condición de jugador experimentado. Con los 26 cumplidos justamente el sábado puso el documento en cancha. Y no cedió más un juego. Para quedarse con el primer set 7/5.
Lo que siguió fue un Tarantino que quería terminarlo cuanto antes. De hecho así había jugado todo el torneo. Buscando jugar puntos cortos y sin complicarse demasiado. Y un Mártire que pese al marcador, creyó hasta el final que podía revertirlo. Pero no fue así. El 3º preclasificado liquidó el match en sets corridos.
El final, incluyó una merecida ceremonia de cierre con buena parte de la familia Garlot. Piezas fundamentales, como así también la organización y los patrocinadores.
Allí estaban frente a frente; y ya en el peloteo previo se podía apreciar la solidez de Tarantino y la mezcla de ansiedad y nervios que tenía el juvenil Mártire.
Comenzó el primer set con un Mártire jugando de la misma forma que lo había hecho en la semi ante Monteferrario. Metiendo todo y buscando el desgaste de su rival. A quién por momentos de esa primera manga lo hizo correr por todo el fondo.
El visitante lo llegó a tener 5/2. Generando de esta forma murmullos con una mezcla de asombro y sorpresa. Pero no lo supo aguantar psicológicamente. Esto le permitió a Tarantino recuperarse anímicamente y hacer gala de su condición de jugador experimentado. Con los 26 cumplidos justamente el sábado puso el documento en cancha. Y no cedió más un juego. Para quedarse con el primer set 7/5.
Lo que siguió fue un Tarantino que quería terminarlo cuanto antes. De hecho así había jugado todo el torneo. Buscando jugar puntos cortos y sin complicarse demasiado. Y un Mártire que pese al marcador, creyó hasta el final que podía revertirlo. Pero no fue así. El 3º preclasificado liquidó el match en sets corridos.
El final, incluyó una merecida ceremonia de cierre con buena parte de la familia Garlot. Piezas fundamentales, como así también la organización y los patrocinadores.